Superstición
“En aquel tiempo no había rey en Israel
y hacía cada uno lo que le parecía bien”
(Jueces 17. 6).
Hagamos un break,
el tiempo es fatuo
y se te eriza la piel.
Lo sé. El ídolo es cierto
cuando crees en él.
Como Jericó caída
los países son sectas,
su arte escatología
su tecnología diezmo.
La intuición, caudillo del instinto,
es la Samaria de la razón,
el triunfo contra la superstición.
Ha pasado el tiempo,
Israel sigue igual:
Babilonia cual sueño lejos
de esta ilusoria realidad.
Lo sé. Abre los ojos. Lo sé.
Obra sin fe,
libertad que esclaviza;
superstición: voz
que hiede esta poesía.
Escrito por:
Francisco-Valenzuela
Comments