¿Qué son la coherencia y la cohesión?
Para que un texto sea comprensible y se pueda identificar el tema que aborda, es necesario que su construcción interna presente dos elementos cruciales que de seguro has escuchado alguna vez: coherencia y cohesión.
¿Qué es la coherencia?
Es un recurso lingüístico formal que tiene la finalidad de organizar el texto de manera tal que las ideas presenten conexión entre sí para entregar un mensaje comprensible.
¿Cómo saber si un texto es coherente?
Si puedes responder la pregunta “de qué se trató lo que leí”, entonces sí había coherencia en él.
Existen dos tipos de coherencia:
Coherencia global: se observa cuando a lo largo de un texto, ya sea de una o quinientas páginas, es posible determinar una idea clara o un tema preciso. Coherencia local: corresponde a las relaciones que se establecen en las distintas partes de un texto, entre oraciones y párrafos.
Ejemplo:
El síndrome de Asperger es un trastorno del neurodesarrollo que afecta al funcionamiento social, la comunicación y el lenguaje, la capacidad motora y las actividades e intereses del individuo que lo sufre, pese a que la inteligencia es normal.
Actualmente el síndrome de Asperger ha sido descatalogado del manual de criterios diagnósticos DSM-5 y esta categoría ha pasado a estar englobada dentro de los trastornos del espectro autista. Sin embargo, cabe explicar aquí sus causas, síntomas y señales para poner en contexto una etiqueta diagnóstica que fue ampliamente usada durante las últimas décadas.
La causa del síndrome de Asperger parece ser la disfunción de varios circuitos cerebrales, y las zonas afectadas son la amígdala, los circuitos frontoestriados y temporales y el cerebelo, estructuras que están involucradas en el desarrollo de la relación social.
En cada párrafo, es posible comprender el tema central, pues las ideas son claras y concretas.
¿Comprendes ahora la importancia de la coherencia? Además, esta no sería posible si no existiera la cohesión.
¿Qué es la cohesión?
Es una propiedad fundamental del texto que le proporciona sentido tanto a los enunciados (frases u oraciones) como al conjunto de estos.
La cohesión de un texto dependerá de la distribución y el orden de los elementos que componen una oración, estos pueden ser palabras que funcionan como conectores o signos de puntuación.
Ejemplo:
A) Caminé, caí, me puse de pie
B) No iré a la playa, sino al río
En el ejemplo A, se utiliza la coma para separar los elementos que constituyen el enunciado, mientras que en el B, se aplica la coma y un conector “sino”. Ambos son comprensibles, por lo tanto, se puede decir que tienen cohesión.
Como autor, es importante que sepas diferenciar entre coherencia y cohesión. Además, es primordial que aprendas a utilizar los conectores, para eso te invito a leer el próximo artículo.
Este artículo fue escrito por:
Claudia Cuevas Moya
Editora de Aguja Literaria